Los Valores ayudan a incrementar el Rendimiento

Durante tiempos de crisis, los valores trascendentales que inspiran y dotan de sentido a la vida de todo individuo son la mejor ayuda que las personas tenemos para enfrentarnos al miedo que genera la oscuridad de la incertidumbre. Estos valores nos ayudan a soportar mejor todas las adversidades y son un instrumento idóneo para mitigar los efectos tan dañinos que el estrés traumático, como el provocado por la pandemia del COVID19, genera en nuestro cuerpo y mente.

Valores y Rendimiento.

El sentido de propósito puede contribuir de forma importante en el rendimiento de los empleados. La presencia de valores está vinculada a niveles más altos de compromiso reciproco entre empresa y empleados. Las personas que consideran que su propósito individual es congruente con su trabajo tienden a otorgar un mayor más significado a sus funciones, lo que les hace ser más productivos. En este sentido, se puede llegar a afirmar que existe una correlación positiva entre el sentido de propósito de los empleados y el margen de EBITDA de su empresa.

A veces, el propósito de un individuo se alinea perfectamente con el propósito de la organización. Otras veces sólo coinciden parcialmente o incluso no existe ningún tipo de coincidencia. Los Líderes de la Organización, el CEO y su equipo, tienen que ser conscientes que parte de su trabajo es garantizar que estos dos propósitos -el organizativo y el individual- estén conectados y se refuercen mutuamente. Es más, en última instancia son la respuesta que debe dar sentido a toda actividad empresarial, interna y externa, desde la contratación y los sistemas de recompensa hasta el diseño de los procesos de producción y la venta de los productos o servicios.

El sentido de propósito de un individuo no es fijo ni estático, tiende a evolucionar a lo largo del tiempo y puede cambiar con rapidez como respuesta a acontecimientos dramáticos. Dado que el propósito individual afecta directamente a la motivación y, por ende, a la productividad, las empresas con visión de futuro deben valorar la importancia de trabajar sobre su propósito organizacional como parte de la obligación que exige el garantizar que el capital humano tiene la atención que se merece.

9 Valores.

En un reciente artículo elaborado por Mckinsey (Igniting individual purpose in times of crisis by Naina Dhingra, Jonathan Emmett, Andrew Samo, and Bill Schaninger) se listan nueve valores que representan las reflexiones mayoritarias de 509 personas representativas de un amplio y heterogéneo espectro demográfico, educacional y ocupacional. Estos valores son:

1. El sentido de cuidado. Cuidado por los demás, sacrificio por las personas queridas y sentido de responsabilidad por satisfacer las necesidades de la familia.
2. Libertad. Determinación de mis propios objetivos, capacidad para formar mis propias opiniones, libertad de iniciativa y de creación.
3. Respeto. Rechazo al insulto y la agresión o la humillación por la discrepancia de ideas.
4. Tradición. Preservación de los valores y rituales propios de la cultura y la religión. Respeto por la historia.
5. Estabilidad. Seguimiento de unos estándares comúnmente aceptados. Respeto por la autoridad, el orden y la estabilidad social.
6. Diversión. Disfrute de las experiencias que ofrece la vida. Aventuras y tener una vida excitante.
7. Equidad y Justicia. Empatía y respeto por los demás. Igualdad de oportunidades. Reconocimiento y respeto de derechos.
8. Sentido de Logro. Capacidad de influencia en los demás. Poder y estatus. Desarrollo personal y profesional. Altos ingresos.
9. Conservación del medioambiente. Cuidado de la tierra. Lucha contra el calentamiento global.

Por último, el Líder tiene que ayudar a sus empleados a entender mejor como conciliar su propio sentido de propósito con el de la empresa. Y para ello, cuanto más abierto y empático sea el líder, más probable será que pueda generar la confianza necesaria para animar a la gente a salir de su zona de confort y buscar la forma conseguir que trabajo y valores estén conciliados.